jueves, 21 de marzo de 2013

Catarata de Tweets

Autoreferencial y egocentrica como nunca. Mas boluda que de costumbre. Y seguramente contando una realidad bastante distorsionada. Su relato, como siempre. Estos son los tweets que vomitó la chiruza hoy:

"Al ingresar me invadió una tranquilidad perfecta y me sentí, por primera vez en ese lugar, más argentina que nunca.

Llevaba un collar de perlas pequeñas, las más blancas que tengo. Las que me regaló Marta, la mamá de Rocío en ésta, su última Navidad.

Quería que sus hijas y Chicho su esposo sintieran que también estaban allí.

Cuando estoy con Francisco le digo que como Megafón lo esperan batallas celestiales. Se rie “Es mi libro preferido, me encanta Marechal”.

Megafón o la Guerra, obra maestra de Leopoldo Marechal. Nave insignia de una generación.

Un Papa muy lector como todo jesuita. Clásicos universales y clásicos argentinos. Porque además es un jesuita argentino.

Antes de pasar al comedor vuelve sobre sus pasos y me dice: “Tengo algo especial para usted y quiero que lo guarde”.

Me entrega una rosa blanca. “Es el símbolo de Santa Teresita, a la que siempre le rezo”, me cuenta.

Es su santa preferida. Me recomienda una y otra vez que la conserve.

Nos sentamos a la mesa y le digo: Sabe que el día que lo eligieron en el santoral era Santa Cristina de Persia, la Sra de los Imposibles.

Se sorprende. (Zas, ya veo que Clarín en un rato titula: CFK le dijo al Papa que fue elegido gracias a ella…)

Me agradece mucho que haya ido. Le pregunto si acaso pensó que no iba a venir. “Y uno nunca sabe” me contesta humilde. Tiene razón.

Uno siempre tiene sensaciones que te las crean de afuera hacia adentro. Hay que insistir mucho en dar de adentro de uno hacia afuera.

Seguro que no te equivocás o por lo menos te equivocás menos... Lo invité a que visite la Argentina, su país.

Me habla de Malvinas, de la Patria Grande, de San Martín, de Bolívar… el Papa, se entiende?

Habla de los jóvenes, dice que logramos algo que no se veía hace tiempo, que la juventud se interese por la política. Me pega en el corazón.

Me habla de la trata de personas y el trabajo esclavo y le comento los avances logrados, aún falta mucho. Todo el compromiso.

Luego de 2 hs de almuerzo y mate cocido (los saquitos los llevé yo) vamos a la salida. Insiste en acompañarme a la puerta para despedirse.

Una mañana muy lluviosa y ventosa. Buen augurio. Ya saben que soy de las que creen en las señales.

Llego al hotel y me avisan que llamó Lito. Que quién es Lito? El párroco de Calafate, mi cura preferido...

Lito dice q Sta Teresita del Niño Jesús, nombre de la santa de la rosa, es la patrona de Calafate y nombre de su parroquia. Por algo es cura

Creer o reventar. La llamo a Rocío y le digo si se dió cuenta que usé el collar que me había dado su mamá.

Me dice que si, y me señala que almorzamos en Santa Marta, nombre de su mamá y lugar donde Chavez y Santos acordaron la paz con Néstor.

No les dije, estoy vieja. Miro por la ventana, el enorme edificio frente al hotel romano donde siempre me alojo desde hace años.

Es el de la orden de los jesuitas. En pocas horas partíamos una vez más hacia Argentina. La Patria.

4 comentarios:

Klaus Pieslinger dijo...

Cómo rompe las bolas con la patria grande.

Walter dijo...

Si, son los mismos que después dicen "la plaza es nuestra, bolivianos de mierda". Se la pasan jodiendo con la hermandad y la patria grande, pero mientras más lejos puedan tener a los "hermanos latinoamericanos", mejor

perez dijo...

Sinceramente , no le creo ni medio que el Pope le haya hablado de "la patria grande " y mucho menos de Bolivar.
Pero claro, quien la va a desmentir.

Anónimo dijo...

No está mal.
Por primera vez no contienen ponzoña. Sólo relato.

"Me habla de Malvinas, de la Patria Grande, de San Martín, de Bolívar… el Papa, se entiende?"
"Habla de los jóvenes, dice que logramos algo que no se veía hace tiempo, que la juventud se interese por la política. Me pega en el corazón."

Dice "me habla".
No dice si bien o mal.

Cuidado, porque es muy probable que los tuits no hayan sido redactados por ella y sí por alguien que sabe cómo disfrazar la mentira con una verdad, al estilo Chomsky.