El “modelo”

por Jose Benegas

Profundizan el “modelo” ¿Qué es eso? Nadie sabe ni le importa, el kirchnerismo es un grupo aunado para abusar del poder y de las arcas del estado. No tiene programa “ideológico” alguno. No anuncian estatizaciones ni siquiera la lucha retórica con algún imperio. Apenas arman alguna situación bochornosa decomisando material de un avión norteamericano. Con lo que hay ya está, y lo que hay es que tienen todo bajo su control, pueden disponer de la recaudación fiscal para los que estén dispuestos a venderse, persiguen a los que no son cómplices pero nada de eso tiene que ver con un programa. No es que creen en un sistema en el que tales cosas pueden hacerse, es nada más que son ellos los beneficiarios y lo están aprovechando.

Enarbolan una liturgia mentirosa y simple en la que hay fantasmas, malos y falsos héroes. Ahora están en la construcción de un dios propio con un sujeto que para empezar se embolsó cerca de mil millones de dólares de su provincia y murió sin que ningún juez le diga “oiga hombre, dónde está la guita”. No tiene ninguna importancia, porque la búsqueda del poder total requiere que la gente se vaya disciplinando sobre la base de esa ficción. La de los terroristas románticos se agota, porque toda la sociedad se ha sometido a grandes mentiras al respecto ¿Se las han creído? No, si se las creyeran no tendrían el poder disciplinador de apagar las consciencias. La gente debe aceptar las mentiras más burdas, porque una vez que eso ocurre, es instrumento perfecto para el poder total.

Sólo se requiere un estado grande, una usina de ficciones y mano dura. Con quién sea, Mirtha Legrand es ideal, porque si se meten con una señora grande qué no lo pueden hacer al verdadero destinatario del susto que es el hombre común.

Se habla de la posibilidad de que el kirchnerismo se convierta en un chavismo después de  las elecciones. Es un error. El kirchnerismo es mucho peor que el chavismo. Cuando avance Chavez será visto como un aprendiz de brujo. El no hizo el trabajo disciplinador total que está en marcha en la Argentina desde hace varios años. Acá hasta la embajadora norteamericana sucumbe al sistema y se tienta humillando a Macri y levantando la figura de Boudou. Todos, incluido la oposición, aceptan que lo único inadmisible en una persona es que sea de “derecha”. Todo tiene que ser izquierda, y la izquierda necesita poderosos porque son cruzados moralistas que están destinados a decirles a los demás cómo tienen que vivir, qué cosas desear y que cosas no desear. De modo que si hay izquierda hay atracción por el poder. Que unos estén afuera es circunstancial.

Por eso en Venezuela hay resistencia. Por más que no le hayan encontrado la vuelta a la trampa a la simulación democrática del dictador. Acá es todo sumisión y cuando hagan la última avanzada y mucho incauto se verá sorprendido porque el “gobierno de los derechos humanos” ha instalado un totalitarismo brutal.

Tortazos, insultos presiones, ahogamiento económico por un lado, un paraíso parasitario y falsos dioses por el otro. El modelo es eso, y lo quieren profundizar agarrados de las polleras de la viuda.

(escucha a Jose Benegas de Lunes a Viernes de 10:30 a 12 en FM Identidad 92.1 )